Título: El hilo de la costurera
Autora: Dagmar Trodler
Páginas: 380
Editorial: Ediciones B
Sinopsis: Londres, inicios del siglo XIX. La joven Penélope se gana la vida haciendo encajes de bolillos, bordando y cosiendo. Tiene un talento innato para la moda, pero un hecho inesperado hará que su vida de un giro sorprendente y sea desterrada junto con su madre a Nueva Gales del Sur, en Australia.
Allí conocerá a Bernhard Kreuz, un médico alemán, y pronto se dará cuenta de que este siente por ella algo más que mera simpatía. La joven costurera, sin embargo, no puede olvidar el terrible hecho que vivió en el barco durante el viaje hacia el continente australiano, ni el aterrador incidente que tuvo lugar justo a su llegada, en el puerto de Sídney... Penélope no tendrá más opción que enfrentarse con su pasado.
Hoy quiero hablarles un poco de una de mis últimas lecturas, un libro hermoso que me sorprendió gratamente y me produjo muchas emociones distintas.
El hilo de la costurera nos sitúa en el año 1806, en Inglaterra, y nos cuenta la historia de Penélope MacFadden, una joven de quince años que trabaja de encajera, cosiendo los cuellos de los vestidos de las damas de la aristocracia. Desde pequeña se ha visto forzada a realizar esta labor, por lo que se ha convertido en una de las mejores de Londres en su oficio.
Un día, un hecho terrible hace que ella junto con su madre sean desterradas a Nueva Gales, en Australia (a donde no arriban precisamente en las condiciones más afortunadas). Allí conoce a Bernhard Kreuz, un doctor alemán que cambia totalmente su manera de ver el mundo. Pero ella arrastra un pasado terrible, por lo que no se le hace nada fácil tomar decisiones al respecto.

Los personajes son de los más variados, aunque siempre resaltando los de personalidades más toscas. Por ejemplo, la jefa de la protagonista, Madame Harcotte: una mujer brusca y autoritaria, que se pasaba todo el tiempo denigrando a todas las chicas que tenía a su cargo. A pesar de lo cual, las jóvenes se conformaban porque lo preferían antes que quedarse en la calle. Tengamos en cuenta que en esa época era de lo más difícil encontrar un trabajo digno, mucho más para las mujeres.
También hay otros un tanto más enigmáticos, como el doctor Kreuz. Este personaje en particular me pareció que le faltó pulirse; creo que se dio a conocer muy poco de su historia, su personalidad y sus sentimientos. Me faltó que la autora mostrase un poco más el trasfondo del por qué acciona de ese modo desde que aparece en el libro. Aunque al final acepté su rol en la trama, nunca terminé de empatizar con él.
“—Necesitas un objetivo —dijo con énfasis—. Tener un objetivo ayuda a la gente a encontrar su hogar.—Yo ya no tengo hogar —respondió ella vacilante.—Entonces ese objetivo puede ayudarte a encontrarlo —insistió. Aquellas palabras sonaban estupendamente, como una maravillosa mentira...”
Hablando de la protagonista, fue con quien más logré conectar sentimentalmente. Creo que es alguien con quien la vida ha sido muy injusta. Me la pasé todo el libro intentando entender cómo es que podía resistir a todas las adversidades, cómo siempre encontraba un pensamiento bueno al que aferrarse.

Los capítulos son pocos en relación a la cantidad de páginas, y son muy, muy largos. Esto sí fue un punto en contra a la hora de leer porque la combinación de letra pequeña + capítulos eternos no es buena para mí. A pesar de ello, la autora logra crear un clima de drama-tensión constante, por lo que aunque necesitara descansar mis ojos de tanto en tanto, las ganas de seguir leyendo estaban latentes en todo momento.
El romance está presente, pero no se hace notar hasta más o menos la mitad del libro. Ahí vemos recién un atisbo de romanticismo (si se quiere). Pero no esperen encontrar una historia de amor de esas que van a los pasos lentos, ni tampoco un flechazo erótico ni nada de eso. Se trata de una especie de sentimiento más maduro, que aflora a raíz de un dolor de muchos años y del pesar de una joven cuya inocencia fue totalmente destruida. Lo de la escasa presencia en el libro es porque me parece que la trama se centra más en la historia de vida de Penélope que en la historia de amor que surge en torno a ella y ese hombre, lo cual me pareció acertado, ya que lo vi como un eslabón más del camino que fueron sus vivencias. A fin de cuentas, es lo que la autora quería que conociéramos.
En resumen, es un libro que tiene escenas demasiado fuertes (tanto en contenido como en expresiones). El drama está desde que comienza hasta que termina, y la historia es muy dura, pero me encantó la manera en que la autora eligió contárnosla. Creo que era necesario hacer uso de todos esos diálogos y descripciones para que pudiéramos comprender ese tormento, y obviamente, como dice la portada, para transmitir cómo puede salirse de ese pozo tejiendo la vida con sueños.
"Todo era como siempre. Casi todo. Las heridas que se le estaban curando, hacían que su espalda tuviera un brillo blanco. Ella no quería tocarlo porque la sensación de tocar los profundos surcos le resultaba insoportable. Y no solo eso. Sin embargo, la piel que cubría su alma herida seguía intacta. Penélope empezó a buscar una salida a su situación..."
¡Muchas gracias a Ediciones B por enviarme el ejemplar!